Deporte ancestral
Todos los deportes modernos suelen buscar en las costumbres de los pueblos ancestrales sus antecedentes más lejanos. Y así es el caso del balonmano con los juegos de pelota que se remontan a la antigüedad y a diferentes culturas, puesto que jugar un balón con las manos es una actividad motriz natural con miles de años de antigüedad, como demostraron griegos, romanos, persas, chinos, indios precolombinos, y un largo etcétera.
Primeros profesionales
Sin embargo, y aunque encontrar sus orígenes no resulta tarea fácil, el balonmano que conocemos internacionalmente como "handball", se sitúa entre los siglos XIX y XX. Es entonces cuando aparecen los nombres de los daneses Koch y Nielsen, los checos Klenker y Woras, el uruguayo Varela, el sueco Wallström, los profesores deportivos alemanes Schelenz, Diem y, especialmente Heiser, considerado por algunos el padre del balonmano moderno. Todos ellos merecen estar en el cuadro de honor de quienes hicieron germinar la semilla de un balonmano a once y basado en el fútbol, para pasar a otro practicado en lugares cerrados, reglamentado y consolidado con siete jugadores sobre la cancha.
Los inicios del balonmano en nuestro país
Y si el balonmano moderno mundial necesitó de varias décadas, tanto para darse a conocer como para afianzarse, algo parecido podríamos decir del balonmano en nuestro país, cuya presencia parece constatada en el año 1928 en los ambientes militares de los que son ejemplo la Escuela Naval de El Ferrol (La Coruña), el Regimiento de Alcántara de Barcelona y la Escuela Militar de Toledo, lugar éste último donde se elaboraron unas primeras normas y trabajos técnicos a cargo del capitán Mendoza, quien vería en 1939, después de nuestra Guerra Civil, el establecimiento en la Escuela Central de Educación Física de Toledo de un primer reglamento de juego con normas pormenorizadas e interpretación del mismo, que se convertiría en publicación fundamental para el conocimiento de nuestro deporte.
Luego vendrían otros hitos nacionales como la creación de la Federación Española en 1941, bajo la presidencia de Emilio Suárez Marcelo, o el primer título nacional de clubes masculinos (a once, claro) conseguido en 1942 por el SEU de Valladolid al vencer al Frente de Juventudes de Murcia por 4-1 en la final. Pero, sin duda, será en 1943 cuando aparezcan las primeras noticias de organización del balonmano en nuestro entorno regional de la época, ya que se crea, aunque sin demasiado éxito, la Federación Oeste de Balonmano (así se llamó al principio en línea con otros deportes). Una Federación amparada en las organizaciones establecidas oficialmente como eran las pertenecientes a Falange Española y de las JONS, de la que dependían el Frente de Juventudes y la Sección Femenina, para el ámbito masculino o de la mujer respectivamente, y, al mismo tiempo, la organización estudiantil del Sindicato Español Universitario (SEU) y la Obra Sindical de Educación y Descanso, de alcance laboral.
Federación de Castilla y León de Balonmano
Desde aquellos tiempos lejanos en los que los románticos dejaron huella... hasta nuestros días, y con la organización de nuestro balonmano gestionado desde cada una de las capitales de provincia, llegamos hasta 1985. Es precisamente en ese año cuando se pone en marcha una Junta Gestora, compuesta por los presidentes de las Federaciones Provinciales, con el objetivo de proceder a la implantación de la Federación de Castilla y León de Balonmano (FCYLBM).
A partir de 1988, con la Federación ya instituida, e igualmente sus ya denominadas Delegaciones Provinciales, se realizan las primeras elecciones a cargos de la Federación, se elaboran los primeros Estatutos de la misma y su inclusión de manera oficial en el Registro de Asociaciones Deportivas de la Junta de Castilla y León. A principios del año 1992 se lleva a cabo la modificación de Estatutos para adaptarlos a la Ley 9/1990 de la Comunidad.
Un año más tarde, concretamente en el año 1993, la Real Federación Española de Balonmano concede la organización en Valladolid del XVII Torneo Internacional de España (ahora Memorial Domingo Bárcenas) con la presencia de las selecciones de Alemania, Argelia, Bielorrusia y España. En el año 2003 se llevan a cabo diferentes acciones de tipo administrativo, como la modificación de Estatutos para adaptarlos a la Ley 2/2003 así como los Decretos de su desarrollo, o la implantación en el año 2006 de una novedosa página web e intranet con múltiples accesos públicos e internos para facilitar la labor de todos los profesionales del balonmano, medios de prensa deportiva y público en general interesado en sus noticias, comunicados, clasificaciones, etc.
En enero del año 2009, la Federación organiza, en la ciudad de Valladolid, los Campeonatos de España de Selecciones Autonómicas en las categorías juvenil e infantil masculinas y femeninas y, dos años después, León acoge los Campeonatos de selecciones juveniles masculina y femenina, igualmente con organización de la Federación (FCYLBM). Así mismo, se organizan los Campeonatos de España de Selecciones Autonómicas cadete del año 2013 en la localidad de Zamora y, durante tres años (2015, 2016 y 2017), se lleva a cabo la organización consecutiva de la Copa Asobal en León, donde también tiene lugar la Copa del Rey en el año 2017.